Thursday 25 October 2012

En su Alma (continuación. V)



Luego de reunirme en dos ocasiones con Ernesto, y no lograr visualizar ningún espíritu perturbador a su alrededor, decidí visitar su tienda en busca de más información. Desde que lo conocí, me pareció que era una persona con los pies bien puestos sobre la tierra, alguien bastante difícil de ser dirigido emocionalmente. En todo momento me dio la impresión de estar en frente de un hombre capaz y consciente de sus actos. Lo que en realidad no quería decir, que no pudiese ser víctima de un espíritu enviado a través de algún espiritista sin escrúpulos, o simplemente que se encontrase en esta situación por los caprichos, ambiciones o venganza de un ser muerto. Pero como a través de todos los libros que había estudiado sobre espiritismo, aprendí que las personas con fuerte resolución y personalidad eran prácticamente imposibles de ser influenciados por un espíritu, insistí en la búsqueda del origen de sus problemas.

Eran casi las diez de la noche, la tienda se encontraba cerrada al público, por eso pude recorrer con tranquilidad y lentitud todo el local en busca de algún alma. Desde que llegamos comencé a sentir su presencia, pero no la podía ver. Durante unos minutos caminé entre maniquíes y estanterías repletas de diversos tipos de ropa y accesorios. Me encontraba completamente abierto para dialogar con la entidad, pero no podía divisarla. No fue hasta que le dije a Ernesto que me abriese una puerta que se encontraba justo detrás de la caja registradora y que a su vez daba acceso al pequeño almacén donde guardaban parte de la mercancía para vender que lo encontré. Nada más entrar lo pude ver, era un señor de mediana edad, se veía pulcro, llevaba un traje negro que conjuntamente con la corbata perfectamente anudada emanaba elegancia, seriedad e inteligencia. Recuerdo que me miró con desdén, estaba agachado en un rincón, su rostro mostraba cansancio, y hasta parecía respirar con dificultad a pesar de no necesitar oxígeno.

Tan solo había avanzado un par de pasos cuando detuve mi andar, lo observé tranquilamente esperando su reacción, pero no me decía nada, solamente agudizaba su mirada mientras jadeaba con más fuerza, no sé si en busca de aire por el cansancio o es que me quería demostrar con su jadeo el enfado que tenía.

Ernesto se había quedado afuera, cerré la puerta lentamente intentando no hacer ruido, por un momento dudé entre aproximarme más o iniciar yo la comunicación, luego opté por ponerme a su altura, pero a distancia, demostrándole que no quería invadir su espacio, por lo que me senté encima de unas cajas sin perderlo de vista, lo saludé cordialmente y le pregunté quién era y qué hacía allí.

- ¿Cómo vienes a mi negocio, a lo que es prácticamente mi casa y me preguntas quién soy? ¿No debería usted presentarse primero?

- Lo siento sinceramente señor. Mi nombre es Carlos Agramonte, pero puede usted llamarme simplemente Carlos, soy amigo del dueño de la tienda. Por favor le pido disculpas si se ha sentido usted ofendido, no fue mi intención, por cierto cómo me puedo dirigir a usted.


- Soy Mariano Castillo, el dueño de todo esto. Mucho antes de que llegase su amigo. Sabía usted que él ha acabado con mi negocio. Hace más de cincuenta años que mis padres fundaron esta librería, aquí he crecido y vivido los mejores años de mi vida. Por eso de aquí no me iré hasta que su amigo tenga que cerrar, ya verá como abriré nuevamente nuestra librería.

A medida que nos comunicábamos iba recibiendo información y visualizando gran parte de la vida del Sr. Castillo, quien no mentía al decir que había pasado casi toda su vida dentro de aquel local. Desde joven ayudando a sus padres, a veces estudiando o leyendo mientras no tenía clientes que atender, clasificando los libros o limpiando las grandes estanterías que abarrotaban la librería. Hasta que el viaje a través de su vida me llevó justo al día en que sufrió un fuerte dolor en el pecho,  un repentino infarto lo hacía caer de la escalera que utilizó para colocar unos libros en lo más alto de un estante.



frankca-dreams.blogspot.com

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