En busca de la navidad

A pesar de que varias generaciones de cubanos hemos nacido y crecido en una nación que en todo momento renunció a los festejos navideños, los cubanos nunca perdimos esta tradición,  o al menos, muchos de nuestros padres no fueron capaces de olvidarla, y en más de un hogar siempre se celebró, aunque fuese a hurtadillas.

Por supuesto unas fiestas con la fotografía de Fidel Castro en el salón de casa, nada tienen que ver con dicho festejo, pero en muchos hogares no tenían otra opción, que brindar bajo la barba del tirano rojo. Cambiando Pavo por Pollo ó Turrón de Jijona por el de maní, comprado a ese vecino luchador que nunca renunció a ser libre, resolvían la situación y daban unidad a la familia fuera del contexto político dictado por el régimen.

Pero desgraciadamente, el comunismo en Cuba, si bien es cierto que nunca pudo quitarnos las fiestas navideñas del todo, logró separar a casi todas las familias cubanas, no existe prácticamente un hogar donde no falte alguien, excluyendo los que ya no pueden estar, que en paz descansen. Nos ha quitado parte de nuestra esencia y nos ha separado, diezmando nuestras almas, a cambio de su permanencia en el poder.

A todos mis familiares, amigos y conocidos les deseo unas buenas fiestas.

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Buscándote en Navidad.

Cuanto te echo de menos en la navidad,

siento vacío…, frío y mucha soledad,

caprichos y turrones, no me llenan ya,

al calor de mi hogar quiero retornar,

arbolitos, y luces de colores me quieren engañar,

aunque en ellos me puedo resguardar,

continúo buscándote una vez más.

Solo deseo una dulce navidad,

en familia y con amigos quiero yo estar,

a la luz de una vela o candil me da igual,

lejos de mi tierra ya no quiero estar,

apiádate de mi, dulce navidad,

junto a mi madre y en mi tierra quiero yo estar.