Friday 10 December 2010

División entre cubanos




Con el recién nombramiento de la congresista cubano-americana por el Partido Republicano, Ileana Ros-Lehtinen, a la jefatura de la poderosa Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Representantes, se escuchan voces de cubanos en apoyo a su arcaica política hacia Cuba, abogando por los recortes de remesas, suspensiones de permisos de viajes a la isla, otorgamiento de visados a estudiantes, académicos y artistas, en fin lo de siempre. Lo único positivo de sus planteamientos es la ayuda a disidentes y opositores en Cuba.
Lo más difícil de resolver entre el exilio cubano, es la diversidad de opiniones y soluciones a la problemática cubana que planteamos, aunque respetando siempre todo tipo de pensar, creo que nos hemos dejado arrastrar por la nostalgia, la influencia de políticos sin escrúpulos, y sobre todo, hemos caído en el juego del gobierno cubano, reaccionando a todas sus agresiones al pueblo, con la misma receta, de otra manera no se justificaría el deseo de muchos de ahogar a la isla, hasta que sus habitantes estallen en revueltas populares en busca de tan deseado cambio. Es cierto que la diferencia generacional entre los exiliados, y los diferentes motivos de salida de Cuba que tenemos, inciden en nuestro proceder, pero me parece que ante tantos años de dictadura deberíamos optar por otras vías y dejar atrás el absurdo bloqueo.  

Como cubano amante de la libertad y del derecho a la libre expresión, no puedo dar mí apoyo a una política que ha sido pésima en los últimos años, por no decir de siempre, por parte de las administraciones de los Estados Unidos, sólo debemos hacer números y ver cuantos años han pasado desde aquel fatídico Enero de 1959 a la fecha. No obstante hay quién persiste en la mano dura hacia los Castro, no digo en ningún momento cuál debe ser la política a seguir, ya que desgraciadamente no tengo esa formula mágica para acabar con los hermanos dictadores, seamos sensatos y dejemos a un lado los partidos políticos, es igual ser de izquierda o derecha, pensemos como ayudar a ese pueblo, sin que continúen siendo las víctimas.

Como pedir más restricciones, sí con ellas no hemos resuelto nada, cuando llegue el día en que los gobernantes de Cuba tengan que llevar agua oxigenada, algodón o una simple bombilla a un hospital, para que sus familiares enfermos sean atendidos con algo de dignidad, yo aprobaré el bloqueo, cuando los hijos de los dirigentes cubanos anden descalzos, seguramente aprobaré el bloqueo, cuando en sus hogares falte, el pan, la pasta de diente y el jabón, no dudaré en apoyar el bloqueo.

2 comments:

  1. Justo y claro, es la política cochina de un lado y de otro no existe un bando, el interés fundamental mueve muchos dolares, tantos que para los del pueblo no hay, esa es la cuestión no interesa que la gente viva, conviene que la gente malviva, mientras ellos tirándose sus trapos sucios a la cara, van cobrando por la espalda. Pero no desesperemos, mientras exista la esperanza es porque algo se puede hacer y creo que poco a poco estamos en el camino.

    ReplyDelete
  2. Así también desde esa política separatista, c han perdido arraigos que en ocasiones afectan hasta nuestra identidad como cubanos.

    ReplyDelete