GLOBALIZÁNDONOS

Abaratar costes, reducir nóminas, involucrar a los clientes en los procesos de producción y servicios, conjuntamente con otras medidas, son las herramientas más utilizadas por las grandes empresas, para aumentar sus ya inmensas fortunas.

A los señores de Ikea tenemos que agradecerles, que al fin toda la familia salga unida de compra, atrás quedaron los días en que los hombres nos negábamos a ir de tienda. Qué bonito…, Maria, Josefa, Francisco y Carlitos, todos juntitos, disfrutando la elección de un puto mueble para casita, ya Francisco, sabe como usar las herramientas, por Internet se informó, y hasta tuvo el detalle de quitar los asientos traseros del coche para llevarse el preciado botín a casa. Sólo le preocupa no equivocarse a la hora de ensamblar su mueble, sabe bien que no admiten devoluciones, además qué diría Maria si mete la pata y lo jode, está en juego su reputación como padre de familia.

Ikea, piensa en nosotros, nos une, somos más humanos, ya no me puedo escaquear a la hora de comprar, ya no puedo pagar un montador de muebles, lo debo hacer yo en casa, y así disfrutar todos en familia por el dichoso mueble, que bien caro hemos tenido que pagar, pero por el bien de mi familia, debo yo montar, GRACIAS IKEA.

¡Hola! ¿que quiele bebel? ¿Helao de Flesa o cocholate?

Pronto olvidaremos a esa chinita del bar que casi no entendemos, la preciada globalización y sus grandes proyectos sociales así lo quieren, apoyados en el proyecto Markk, diseñado por éste personaje, de mismo nombre, los restaurantes y bares chinos, ya no son rentables, y para ello cuenta con el apoyo de diferentes firmas, en un rediseñamiento de locales, ¡fuera los camareros!

Sólo necesita una chica por cada turno de trabajo, preferiblemente rubia de Europa del Este, con más de 1.80cm de estatura, piernas torneadas, pechos robustos y un depurado castellano, además deben dominar el catalán, checo y el andaluz, por las dudas. Dejarían entrar a todo tipo de clientes. La seguridad esta garantizada.

El super vending daría todo el servicio a sus clientes, para bocata, presione 1 por favor, para bocadillo bacon-queso 2, y así sucesivamente.

Para disminuir costes las bebidas no se sirven, se  enchufaran directamente a nuestros clientes, una vez sentados en sus mesas, con un sistema de inyección presurizada, dinámico y placentero.

En todo momento mediante pantallas estaremos informando la manera de proceder una vez finalizado su menú, no se preocupe que les indicamos con bastante reiteración como hacer la limpieza de sus platos y cubiertos, agradeciéndoles en todo momento por su agradable visita.

Señores capitalistas, muchas gracias de todo corazón, por hacernos la vida más placentera, sin olvidar siquiera un detalle, hasta los señores de Phillip Morris han procurado devolvernos la habilidad de utilizar nuestras manos, desde parvulario no hacía manualidades, que buen proyecto, si hasta fumo menos, eso sí, espero que cuando siga subiendo el precio de su inventito, la quiniela halla podido ganar y así me pueda bancar una cajetilla sin tener que por su precio llorar.